Tiny Finger Point Hand With Heart -->

domingo, 23 de abril de 2017

Me da miedo estar tan sola, sentirme tan sola, que todos me vean tan sola. Me gustaría dejar de exigirle todo lo que le exijo a Santiago. Le hago mal. Tengo miedo de cansarlo y que me deje, de sofocarlo. Necesito tener mis amigos, gente con quien hablar, salir, confiar. Perdí todos los que tenía. Bueno, no los perdí, los aleje. Me exijo mucho a mi misma y pretendo demasiado de los demás, y los alejo. Lo único que tengo en esta vida es a mi mamá y a mi novio, siento que más no tengo. Son lo más importate y lo único que tengo. Son los que me dan fuerzas para seguir, porque si no estuvieran... no sé qué haría. Pero muchas veces los maltrato, soy muy incoherente, lo único que tengo y parece que quisiera perderlos. Me aman, yo sé que me aman, y me aguantan, aguantan todo lo que les hago todos los días, pero el miedo que tengo cada vez crece más. Si no fuera por Santiago, estaría sola todo el día, todos los días. No tengo nada que hacer, mi mamá trabaja toda la tarde, estoy sola. Lo único que hago es ver tele o hacer cosas del colegio. Necesito amigos. Necesito sociabilizar con las personas. Necesito dejar de sentirme tan sola. Tengo que desapegarme de ellos, porque si ellos no están ahí si que estoy bien sola, sin NADIE. En la escuela siempre trato de adaptarme a algún grupo, pero nunca encajo. Siempre les encuentro el defecto a las personas, y eso no está bien, es feo, es como discriminar pero sin decirlo. Y me alejo, porque capaz que los molesto, capaz que no quieren juntarse conmigo. Me tratan bien, pero siento que no son más que solo compañeros, y que no vamos a llegar a ser amigos. Santiago es muy celoso, por eso intento acercarme a las chicas para hacerme amigas y no a los chicos, después piensa cualquier cosa. Siempre fui muy de ser amiga de los chicos más que de las chicas. Bueno, no siempre, pero últimamente. Él me abrió los ojos de lo que significa ser un amigo de verdad, con todas las letras, como algunos de los que él tiene. Los amigos no se olvidan de vos, los amigos te hablan para juntarse, o cuando te ven mal, te preguntan y te joden hasta que les cuentes qué te pasa (otros no se dan ni cuenta), te apoyan y te ayudan a superar momentos difíciles. A mí me cuesta mucho encontrar un amigo así, que valga la pena, que cumpla con esos aspectos. Seré demasiado exigente? Si. Y con todo. Será por eso que no tengo amigos.

viernes, 28 de agosto de 2015

"Yo no soy tan buena y no quiero serlo. Yo soy una pecadora y así la paso mejor. Yo quiero vivir el cielo acá y no después; el cielo eterno será para ustedes, pero yo quiero ser feliz ahora, no después. No quiero ser una santa. Quiero ser feliz y las santas nunca han sido felices."

UN ERROR

Nada de lo que te diga hará que cambies de opinión si primero no cambio yo. Te fuiste una noche y nada me importo, si vas y venís ni cuenta me doy y poco a poco resbale con tu ausencia porque ya nada encaja en mi vida y se desmorona todo tapándome la salida.  Algo cambió, algo nos dejó y hacemos nuestros caminos por separado como cuando esto empezó. 
Seguro encontrarás algo mejor y a mi me toque lo peor si la vida es justa algunas veces pero no en el amor, es un juego aparte y podemos perder los dos aunque siento que todo el peso lo tengo de nunca haberte dicho lo que sentía. Y todo ese tiempo que perdimos puede que la culpa la tenga yo pero del que nos sobró de ese sos culpable vos. 

- “Todos mis deseos Te los llevaste vos Y ya nada existe después de vos ”- 


La misma historia, siempre más de lo mismo

Y la verdad se hizo sangre y nadie se hizo cargo de nada. O quizás nunca llegó a ser certeza, pero esta duda me dejó tantas noches en vela que me la terminé creyendo, y me engañé, me mentí. Es que cuando unos ojos te miran así, no sabes distinguir una caricia de un puñal, y hasta la mirada más transparente cae en la confusión, aunque esos ojos digan todo, pero esas palabras me dejan ciega y no puedo escuchar, y los movimientos se vuelven torpes y mi boca ya no sabe qué decir para rescatar lo poco que queda de lo mucho que arruinó. Aunque no me creo culpable de todo... Sería demasiado facilismo aplicado a la situación.
Pero aún así, hoy te sigo soñando, hoy me sigo desvelando y cierro los ojos y me vuelvo a acostar en la misma cama, y puedo percibir el mismo perfume, y me pregunto por qué, cuándo, cómo puede ser que de un momento a otro las cosas cambien tanto, si hasta ayer dormía en tus brazos y hoy los escalofríos recorren mi cuerpo, y los recuerdos una y otra vez conducen a la melancolía, y otra vez a la pregunta de por qué siempre la misma historia, y otra vez me echo la culpa, pero no, y pienso de nuevo, porque me queda el triste (y absurdo, inútil) consuelo de saber que la peleé, o al menos lo intenté, porque cuando el resultado no es el esperado siempre queda ese resabio de "podría haber hecho un poco más" y el puto auto flagelo. Porque, mal que me pese, sigo siendo eso que siempre buscaste... Hasta que lo tuviste. Pero hoy no te encanta tenerlo, y quizás tus palabras no se pusieron de acuerdo con tus actos en el momento exacto, los miedos fueron más fuertes, el futuro nos pisó de antemano y de vuelta al principio, a ningún lugar, pero con la diferencia de que hoy te sangro más de lo querido y más de lo que vos alguna vez supiste hacerlo. Porque está la bronca de no saber ni haber sabido interpretarte, de que hoy me dejes sin palabras, de no poder avanzar, de no tener el premio ni en la última mano jugando las pocas (y malas) cartas que quedan, de que ya no quedan excusas, queda la resignación, me queda ese beso que nunca daré, porque este adiós a lo que nunca fue no maquilla un hasta luego, y duele quedar en la duda, en la incertidumbre de "¿qué hubiera pasado...?" si hubiera sabido leer tus gestos y tus palabras en el momento justo, si un segundo antes comprendía lo que creía no tener importancia, si me hubiera decidido a apostar cuando las cartas me acompañaban y no me dejaba asustar por un ancho falso. Pero es así, y aunque me pese, la sinceridad siempre la llevé como estandarte, para bien o para mal. Y no me arrepiento, aunque eso conlleve querer volver las agujas del reloj hacia atrás y maldecir el hoy, donde comprendo que mucho peor que las lágrimas o el dolor, es la resignación, de tener que aceptar que nos quedamos en la mitad, que no llegamos a nada, por no tener los huevos suficientes para saber querer de esta forma, y comprender que cada uno sigue su camino, como en un tiempo atrás antes de cruzar. Pero te digo una sola cosa: "mil besos no alcanzan sin un corazón".

jueves, 2 de julio de 2015

Lo prohibido se hace tentador


"Yo ya era así antes de que tú llegaras, caminaba por las mismas calles y comía las mismas cosas. Incluso antes de que llegaras yo ya vivía enamorado de ti y a veces, no pocas, te extrañaba como si supiera que me hacías falta."
-Julio Cortazar.